No existe algo así como una semana álgida de novedades en el mundo Glee (lo cual es muy coherente con la dinámica informativa de su mundo-pasillosdesecundario). Si los Gleeki hemos estado en Stand By es porque, ay, necesitábamos una semana –at least- para procesar los encantamientos del Best Glee Ever, el “Britney/Brittany”.
Pero mientras estábamos tirados con cara de Kurt sorprendida, Grilled Cheesus no para de bendecir a esa Capillita Sixtina del pop que está pintando Ryan Murphy, así que, miembros de la comunidad, pasaremos a dar lista de los eventos de esta semana:
-Primero el señor creo a Baz Luhrmann. Eso seguro, sin Moulin Rouge solo habría dos certezas: 1-El mundo sería un sitio mil veces peor y 2-No habría Glee sin ese licuado de todo lo que vale la pena en este mundo que es Moulin Rouge. Entonces, un día Baz Luhrmann apareció (en la casilla de mail de Ryan Murphy) y dijo Subject: Quiero dirigir un Glee. ¿Qué se le dice a tamaño desafío? “Obvio que si, papá” (dicho en perfecto inglés) exclamó Murphy. Y sí, palabras mayores: Luhrmann está in the talk para dirigir un Glee. Ufff. How wonderful life is now that Luhrman is in Glee?
-Segundo, Nsync. You know: 90, boyband, el River de los Backstreet Boys, Justin, Lance, JS, Joey, Chris. Bueno, en esa sintonía de amor por el rescate emotivo con más presente que aire de “chistecito”, parece que Glee está, una vez más, “in the talks”, para realizar un homonaje versión Glee a aquello que además de Bye, Bye, Bye le regaló al mundo a Justin Timberlake (en tu jeta, Disney).
-Tercero: ¿Más grandes que los Beatles? A diferencia de los cuatro fantásticos que en dos décadas solo metieron unos míseros 61 temas en Billboard, los Glee en dos añitos han metido 75. Lo venimos avisando. Habrá que mandarle un video youtubesco a Sir Paul “Te rompo el orto con las entradas yeah yeah yeah” McCartney para avisarle. (BTW: Feliz no cumpleaños, Mr. Lennon)
Esto fue todo en Glee News, pipol.